El régimen de Maduro corta el suministro de agua a los asilados en la embajada argentina en Caracas

El régimen de Nicolás Maduro intensificó este sábado el asedio a la embajada argentina en Caracas, al cortar el suministro de agua a los asilados que se encuentran bajo protección de Brasil. La denuncia fue realizada por Magalli Meda, activista venezolana y jefa de campaña de la líder opositora María Corina Machado, quien informó a través de redes sociales que el acceso al camión cisterna que debía abastecer de agua a la sede diplomática fue negado. Esta medida se produce un día después de que otro asilado denunciara que el régimen chavista impidió el ingreso de medicamentos esenciales para los refugiados.
Meda, quien se encuentra entre los cinco asilados en la embajada argentina, expresó: "La embajada está sin agua. Negadas las medicinas de ayer de Omar González. Negada el agua del camión cisterna hoy". Omar González, uno de los refugiados, había denunciado previamente que el régimen había bloqueado la entrada de medicamentos necesarios para su tratamiento de enfermedades cardíacas, lo que pone en riesgo la salud de los asilados.
El gobierno de Maduro comenzó a asediar la embajada argentina en agosto, tras el desacuerdo por no reconocer la autoproclamación de su victoria en las elecciones. Desde entonces, Brasil ha estado protegiendo tanto la embajada como los intereses argentinos en Venezuela. La bandera brasileña ondea en el mástil, mientras que la diplomacia argentina se ve atrapada en una situación tensa con el régimen venezolano.
Los otros asilados en la embajada son Pedro Urruchurtu, Claudia Macero y Humberto Villalobos, todos miembros del partido Vente Venezuela. El sexto refugiado, Fernando Martínez Mottola, exministro de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), se entregó al régimen de Maduro el 20 de diciembre, tras no poder resistir la presión.
El presidente argentino Javier Milei se pronunció desde Davos, Suiza, sobre la situación: "Vamos a seguir trabajando fuertemente para que sean liberados y para que ese régimen opresor socialista, como todo régimen socialista, los libere". Además, la situación se ve empeorada por la detención del gendarme argentino Nahuel Gallo, quien se encuentra en paradero desconocido desde diciembre.
El gobierno de Estados Unidos y el Parlamento Europeo también se han pronunciado en contra de la legitimidad del nuevo mandato de Maduro, sumando presión internacional a la crisis que atraviesa Venezuela.