Se suicidó la ex-novia del jugador Junior Benítez a quien denunció por violencia de género

En las últimas horas se quitó la vida Anabelia Ayala, la expareja de Óscar Junior Benítez, el futbolista que jugó en Boca, Lanús, Argentinos Juniors y otros equipos internacionales.

Benítez protagonizó varios episodios violentos contra su exnovia y su familia. También fue acusado de desobedecer una orden de restricción impuesta en su contra. Fue condenado a 6 meses de prisión en marzo del 2022 y volvió a ser arrestado en febrero del año pasado. El segundo juicio en su contra estaba próximo a realizarse, por lo que se encuentra con prisión domiciliaria.

Junior Benítez está imputado por el delito de “coacción agravada por el empleo de arma de fuego en concurso real, con daños, amenazas y desobediencia”. El fiscal José Luis Juárez, de la UFI N°12 de Lomas de Zamora, pidió la prisión preventiva y envió el requerimiento de elevación a juicio.

Según se pudo saber, Benítez y Ayala convivieron en México por más de un año, entre el 2018 y el 2019, cuando el futbolista fue fichado por Atlético San Luis. Ella se volvió a la Argentina después de haber sufrido violencia de género.

En 2021, el jugador volvió al país y siguió hostigando a su ex. En enero de ese año, Benítez fue hasta la casa de la familia de Ayala, amenazó con un arma de fuego al padre de la joven y prendió fuego algunas pertenencias de su expareja. Por este caso, en marzo del 2022, el hombre fue condenado y estuvo seis meses detenido, recuperó la libertad y volvió a atacar.

En febrero del 2023, Benítez desobedeció la orden de restricción que tenía para acercarse a la víctima y a su familia a menos de 300 metros, volvió a amenazarlos, pero esta vez con un cuchillo, y le pinchó las ruedas del auto al papá de Anabelia. Después, golpeó brutalmente a su suegro y terminó detenido.

El hombre decidió radicar la denuncia, aunque su hija nunca quiso ir a declarar por miedo a sufrir represalias. La fiscalía realizó un informe psicológico y determinó que la mujer “posee indicadores propios de las víctimas de violencia de género, así como que la misma se encontraba expuesta a continuar sufriendo hechos de estas características por encontrarse inmersa en un círculo de violencia”.