Los Ángeles sigue bajo el azote de incendios devastadores: 11 muertos, 150 mil evacuados y 15 mil hectáreas quemadas
Los incendios que azotan Los Ángeles desde hace varios días continúan sin control, dejando a su paso tragedias y devastación. Con un saldo de al menos 11 muertos y 13 personas desaparecidas, la situación se agrava a medida que los focos de fuego avanzan hacia nuevas áreas. En respuesta a la magnitud de la crisis, el gobernador de California, Gavin Newsom, duplicó el número de efectivos de la Guardia Nacional del estado, sumando 1.680 miembros a las tareas de extinción y apoyo a los bomberos.
Desde que se desataron los incendios el martes, más de 15.000 hectáreas han sido consumidas por las llamas, lo que ha obligado a la evacuación de más de 150.000 personas. A lo largo de esta semana, más de 12.000 edificios han quedado destruidos y los equipos de extinción, que cuentan con el respaldo de 1.600 vehículos y unos 60 aviones, siguen luchando en condiciones extremas para controlar los incendios.
Entre los focos activos, el incendio Lidia sigue siendo un desafío, mientras que otros como Kenneth, Hurst, Eaton y Palisades se encuentran parcialmente contenidos, con niveles de control que oscilan entre el 11 % y el 80 %.
Ante el caos generado, las autoridades también se enfrentan a un creciente aumento de saqueos en las zonas afectadas por los incendios. Como medida preventiva, se decretó un toque de queda estricto entre las 18:00 y las 6:00 horas en las zonas más afectadas, como Pacific Palisades y Altadena, donde la devastación es mayor. La Policía ha detenido a 22 personas hasta el momento, la mayoría de ellas por robos y saqueos, y varios de los detenidos enfrentan cargos por violar el toque de queda y por posesión de armas de fuego y narcóticos.
Mientras tanto, los esfuerzos de rescate y recuperación continúan, con los servicios de emergencia trabajando sin descanso para mitigar los daños y asistir a los afectados.